Calumnias contra la Nueva Tradición Kadampa

Calumnia: La NKT está dirigida por un grupo selecto de déspotas

Verdad: No hay ningún indicio de ello. La NKT-IKBU se gestiona de forma totalmente democrática, de manera que el poder se distribuye a partes iguales entre el director espiritual, los directores ejecutivos y los miembros. Véase el Reglamento interno (especialmente los puntos 1.4, 2.1 y 4.1).

Calumnia: La NKT es proselitista y su propaganda, agresiva

Verdad: La NKT no intenta convertir a nadie y, de hecho, gran parte de los que asisten a las clases de meditación no se hacen budistas. Los centros kadampas dan a conocer sus clases principalmente a través de carteles, anuncios en los periódicos y las páginas web de sus centros. La intención es ofrecer a todo el mundo la posibilidad de estudiar y practicar las enseñanzas de Buda para así poder desarrollar sabiduría, cultivar un buen corazón y mantener un estado mental apacible.

El propio Buda viajaba de pueblo en pueblo para impartir sus enseñanzas. No hay ninguna ley que prohíba crecer a los centros budistas.

Calumnia: En la NKT animan a los estudiantes a dedicar todo su tiempo a apoyar un centro aunque no les quede tiempo para su desarrollo espiritual personal

Verdad: En la NKT no se anima a nadie a trabajar en detrimento de sus otras prácticas espirituales. Gueshe Kelsang explica que, según el ejemplo de Yhe Tsongkhapa, hay tres ruedas de actividades de Dharma: la de estudiar el Dharma, la de meditar en el Dharma y la de trabajar por el Dharma. Debe haber un equilibrio entre ellas.

Calumnia: La NKT está más interesada en reclutar voluntarios que en ayudar a las personas

Verdad: Esto no es cierto. El objetivo de la NKT es ayudar a las personas a encontrar paz interior. Para ello se necesitan centros, publicidad y muchas otras condiciones que los voluntarios pueden ayudar a reunir. La afirmación de que la NKT está reclutando personas para su propio beneficio no tiene ningún sentido.